Gusto por el pan
A mi hermana menor le encanta el pan, y lo come casi todos los días. Por supuesto en la mañana y cuando tiene un poco de hambre siempre lo come. Si le preguntas sobre su comida favorita, te responderá al instante: “¡Me encanta el pan, hay muchos sabores y está muy rico!”
Un cambio repentino en un día normal.
Igual que siempre, al comer un pan con pasas en la mañana, empezó a decir “¿eh? Tengo comezón en la garganta, ¿habré comido demasiado?, siento que tengo atorado”.
Mi familia incluyéndome, pensamos que seguramente comió demasiado y no era algo para preocuparnos. Pero días después, una vez más mi hermana al comer un pan con trozos de nuez, dijo lo mismo: “Siento como si tuviera algo atorado en la garganta.” Al escucharla decir eso nosotros pensamos otra vez a la ligera que debió haber comido demasiado, pero a partir de ese momento, empezó a cambiar su situación.
Aterradores síntomas de alergia
La piel de mi hermana se enrojeció y empezó a tener mucha comezón. Naturalmente nos preocupamos y le pedimos que descansara. Después de un momento, mi hermana se sintió mejor, pero nos llevamos un susto por haber ocurrido de pronto.
En ese tiempo estaba yendo a la universidad de medicina, y debido a que conocía la reacción de un shock anafiláctico, decidí investigar una vez más.
Me di cuenta que el trigo es uno de los ingredientes mostrados por obligación en la información nutrimental de los alimentos. Además del trigo, se incluye la leche, camarón, cangrejo, cacahuete y huevo.
Al investigar los síntomas de alergias, encontré que se puede sufrir de malestar en la boca y garganta, estornudos, escurrimiento nasal, dificultad para respirar, dolor estomacal, diarrea, entre otros. En el peor de los casos, puede llevar incluso a la muerte, por eso sentí que era importante conocer mis alérgenos.
Debido a que todos los días hay posibilidad de tener alergia a un alimento que comemos, es mejor evitar el consumo excesivo.
Medidas futuras.
Esta vez, afortunadamente no llegó al extremo de la muerte, pero me dio mucho el hecho de sufrir reacciones alérgicas.
Es por eso que me gustaría ir al hospital y hacerme un análisis para saber cuáles son mis alérgenos. Además, quiero poner atención día con día porque sé que incluso mi comida favorita podría ser uno de mis alérgenos. Tras comer algo, si se siente una extraña sensación por más pequeña que sea, sería buena idea no comerlo a la fuerza y mirar las señales de nuestro cuerpo.